Ir a la tienda | Redacción Nonita
Un buen cunnilingus (o sexo oral en vulvas) tiene su parte de arte y de técnica. Aunque te pueda parecer algo complicado, en realidad se necesitan solo 3 cosas: voluntad, comunicación y ganas de aprender. La clave está en mover la lengua de forma adecuada y explorar cada punto erógeno con la intensidad justa, para lograr que el final se convierta en un orgasmo prolongado e intenso.
¿Quieres ver cómo su cuerpo vibra de placer y se condensa en orgásmicos sonidos? ¡Vamos a darle a la lengua!
El cunnilingus del misionero
¡Es un verdadero clásico! La postura más simple y cómoda. La persona con vulva está tumbada bocarriba con las piernas abiertas, y la otra coloca su boca encima de su vulva, jugando con la lengua para estimular las distintas partes de esta (clítoris y labios). Puedes ayudarte con las manos o con el vibrador ROMP Hype para estimular el punto G. ¡Bienvenido sea el orgasmo!
El sillón de la reina
El doggylingus o perrilingus
Esta postura es parecida a la del perrito, es una postura de alto voltaje erótico. La persona con vagina se pone en cuatro y su pareja utiliza la lengua para estimular la vulva, prueba llevar la punta de la lengua hacia el clítoris desde atrás, estimulando en el camino a los labios mayores.
Lengua de gato
Por último te recomendamos:
- Lubricante de sabores: para no crear irritaciones y que todo fluya.
- Puedes introducir juguetes sexuales como succionadores o vibradores
- Comunicación en todo momento: habla con tu pareja y pon atención a sus respuestas corporales para conseguir la coordinación perfecta de sus cuerpos.
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